Hoy clausuraron los JJ.OO. en Pekín.
Las sensaciones que me quedan después de estos 16 días son muchas... haber presenciado el resultado de muchos esfuerzos, sobretodo de l@s deportistas y sus entrenadores; los sentimientos de alegria, sorpresa, diversión, compañerismo, deportividad, solidaridad y también competición, impotencia y tristeza entre muchos otros que seguramente no hayamos percibido; la sencillez de las raíces de esas personas y su valor por haber llegado allí; las diferencias entre deportitas por sus posibilidades para entrenar y sus metas, unos luchando por arrebatar el oro y otros persiguiendo únicamente no perder el primer partido...
Por supuesto, ajenas a toda esa emoción, ha habido muchas personas implicadas dentro y fuera de la competición, mucho espacio utilizado, mucha atención tomada, muchos intereses, algunos engaños... Todo un despliegue y ejemplo de organización.
En definitiva, un gran acontecimiento celebrado una vez cada cuatro años, en que los aficionados a algun deporte debemos reflexionar sobre la pasión, el esfuerzo y el sacrificio de la alta competición, las demostraciones de deportividad a ese nivel y, de una forma más sencilla, valorando el deporte como medio para mantener o mejorar la salud física y mental.
No está mal que, por lo menos en cada Olimpiada, recordemos que algo tan natural tiene mucho que aportar.
domingo, 24 de agosto de 2008
Juegos Olímpicos en Beijing
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